Se trata de una plaza interior de planta circular a la que se accede desde cuatro calles diferentes. Fue proyectada por Salvador Escrig Melchor en 1837
Fue desde su creación un espacio destinado al comercio y, en sus orígenes, en especial a la venta de pescado y carne. Hoy se presenta como un recoleto lugar rodeado de bajos edificios y plagado de comercios dedicados, especialmente, a complementos textiles. Además, los domingos se convierte en un colorido mercado que se extiende por las calles próximas del casco antiguo de Valencia, con puestos de flores, complementos de moda, cuadros y otros artículos.