a Boca de la Verdad es un monumento romano rodeado de misterio. Aunque no está claro su origen o función, su leyenda fue creciendo siglo tras siglo y proviene de los tiempos del medioevo, cuando durante los juicios por ordalía La Boca de la Verdad era usada para impartir justicia.
Para ello un verdugo introducía la mano del acusado en La Boca de la Verdad. En ese momento el acusado debía proclamar si contaba la verdad o una mentira.
Entonces, si la boca detectaba una mentira, se tragaba la mano del acusado. Por supuesto que la realidad era distinta, escondido detrás del gran disco de mármol había un segundo verdugo que cortaba la mano del acusado con una espada.